LA ESPADA DE MAMAI (fragmento de "KULIKOVO")
Una leyenda popular cuenta que, en su precipitada huida tras la derrota en la batalla de Kulikovo en 1380, Mamai, el comandante del ejército tártaro-mongol, estuvo a punto de morir ahogado en las aguas del río que se vio obligado a vadear a su paso y, aunque logró salir vivo a la otra orilla, perdió en sus aguas su espada con la empuñadura de oro. En recuerdo a aquel incidente el río recibió el nombre de Krasívaya Mecha (literalmente, “hermosa espada”).
A lo mejor, la espada de Mamai aún yace en el fondo de este río en la región de Tula, Rusia...